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ENERGY CONSERVATION TECHNIQUES

Técnicas de conservación de energía

LO QUE NECESITA SABER:

¿Por qué son importantes las técnicas de conservación de energía? Se usan las técnicas de conservación de energía para aliviar la disnea y la sensación de que se está quedando sin oxígeno. También pueden servir para disminuir la producción de dióxido de carbono y bajar su ritmo cardíaco. Estas técnicas le permiten usar menos energía para realizar las actividades de la vida diaria. La rehabilitación pulmonar le ayudará a obtener más información sobre las técnicas de conservación de energía. Pregunte a su médico si la rehabilitación pulmonar es adecuada para usted.

¿De qué maneras puedo conservar mi energía?

  • Descanse antes de hacer las actividades más difíciles. Deténgase si le falta el aliento o se siente cansado.

  • Haga un plan por escrito para sus actividades diarias y semanales. Asegúrese de repartir a lo largo de la semana las actividades que le insumen más energía. Por ejemplo, no haga la compra y pase la aspiradora el mismo día. No se preocupe si no termina la actividad o no cumple con su plan.

  • Tome nota de cuándo tiene más energía. Programe las actividades más difíciles para esas horas. Si tiene más energía por la mañana, puede cocinar todas las comidas del día a esa hora.

  • Programe momentos para relajarse a lo largo del día. Esto puede ayudarle a recuperar la energía.

  • Pida a sus familiares y amigos que lo ayuden con algunas actividades. Es posible que su médico pueda decirle cómo buscar servicios de ayuda en la comunidad.

  • Trate de bajar y subir menos las escaleras. Ponga un orinal o silleta en el piso de abajo si el baño se encuentra en el piso de arriba de su casa. Ponga un orinal o silleta en el piso de arriba si el baño se encuentra en el piso de abajo de su casa.

¿Cómo puedo conservar energía cuando me ocupo de mi cuidado personal? Haga tantas actividades de cuidado personal como pueda mientras que está sentado. Usará más energía si realiza estas actividades estando de pie.

  • Tome asiento para cepillarse los dientes, lavarse el rostro, afeitarse y maquillarse. Apoye sus brazos sobre el lavabo del baño para hacer estas y otras actividades similares.

  • Ponga un asiento en la ducha.

  • Póngase una bata después de ducharse para no usar energía al secarse. Es posible que deba descansar después de ducharse y antes de vestirse.

  • Eleve el asiento del inodoro. Es posible que también deba elevar las sillas de su hogar. Usa mucha energía para ponerse de pie.

  • Haga instalar barras de seguridad en el baño de su hogar. Puede tomarse de las barras para levantarse y evitar las caídas.

  • Use artículos de asistencia para su cuidado personal, como un cepillo con un mango largo o un calzador de zapatos.

  • Use zapatos que se puedan poner y sacar fácilmente, para no tener que agacharse y amarrar los cordones.

¿Cómo puedo conservar energía con los quehaceres del hogar?

  • Ponga los objetos sobre estantes que se encuentren al nivel de sus ojos o de su cintura. Se precisa más energía para alcanzar algo que está por encima de la cabeza o para agacharse.

  • Use un escurridor de platos en lugar de secar los platos a mano después de lavarlos.

  • Siéntese en un banco alto mientras cocina o lava la vajilla.

  • No cargue ni levante las cosas. Empújelas, hálelas o deslícelas. Si tiene que levantar y transportar, use las piernas para levantar. Traslade los objetos cerca del cuerpo.

¿Qué puedo hacer para no sentirme tan aislado? Es posible que usted se sienta aislado si tiene una enfermedad pulmonar crónica. Usted podría estar demasiado cansado como para hacer actividad con otras personas. Programe actividades sociales todas las semanas. Es posible que se sienta más conectado y menos aislado si pasa tiempo con sus familiares y amigos. No tiene que dedicarle más de media hora. Invite a sus familiares o amigos a su casa, o hable por teléfono con ellos. Puede unirse a un grupo de apoyo para personas con enfermedades pulmonares crónicas.

ACUERDOS SOBRE SU CUIDADO:

Usted tiene el derecho de ayudar a planear su cuidado. Aprenda todo lo que pueda sobre su condición y como darle tratamiento. Discuta sus opciones de tratamiento con sus médicos para decidir el cuidado que usted desea recibir. Usted siempre tiene el derecho de rechazar el tratamiento.